Aperitivo, primer, plato, segundo y postre. Turrón, café, cortado, infusión, té, café con leche. Con mala leche. Todos corriendo para atender a mucha gente al mismo tiempo. Muchísima gente que viene a celebrar las cenas navideñas en el sitio donde trabajo. Gente pija. En los percheros colgados hay una cantidad de pieles (todo un pequeño ecosistema extuinguido) cuyo valor en el mercado alcanza los presupuestos de algunos estados pobres. Mucho correr y mucho estrés. Y sobre todo mucho peloteo e hipocresía. Los encargados estresados por lo que van a decir los de arriba. Los de arriba por lo que van a decir los de más arriba. Y como a los humanos nos encanta la jerarquía siempre hay alguien más arriba. Hasta el de Súper Más Arriba cuyo hijo, dicen, nació hace 2005 años y en cuyo nombre estos días servimos aperitivo, primer plato, segundo plato, postre, turrón y café. ¡Feliz Navidad! y que se acabe ya porque ¡no puedo máááás!