Estuvimos estirados en Barceloneta (la playa de Barcelona) entre otros miles de cuerpos amontonados sobre el arena, sacando la ventaja al cambio climático. Hacía el tiempo de verano y el otoño salió a disfrutarlo.
Una pareja pasó al lado nuestro. El chico llevaba la tabla de surf (más de decoración que de uso práctico) y se pararon justo al lado nuestro en el único hueco que había para poder estirar las toallas. El chico dijo a su acompañante: “Es que a mi me gusta tener la gente cerca; pero de lejos”.
El problema de nuestra "verdad incomoda" no es el cambio climático; es el cambio desde el sistema heliocéntrico al egocéntrico.
Una pareja pasó al lado nuestro. El chico llevaba la tabla de surf (más de decoración que de uso práctico) y se pararon justo al lado nuestro en el único hueco que había para poder estirar las toallas. El chico dijo a su acompañante: “Es que a mi me gusta tener la gente cerca; pero de lejos”.
El problema de nuestra "verdad incomoda" no es el cambio climático; es el cambio desde el sistema heliocéntrico al egocéntrico.
Comentarios
"Mirame pero no me toques"
No?
Boa semana,
agente_99
besiños
e.
sí A 99 es un poco de "mirame pero no me toques", pero es más "dejeme en paz"
E. ¿cuándo volveras a tu blog? pronto espero
un abrazo