Ir al contenido principal

Kosovo reconoce la independencia de Osetia de Sur y Abjasia

Si (en un mundo perfecto) las relaciones entre los países estuviesen basadas en la ética, en los principios de igualdad y respeto y en el bilateralismo, este titular acapararía las portadas de los principales periódicos mundiales. Pero desgraciadamente no es así, y nos tenemos que satisfacer con los ladridos de Palin y Chávez que calientan las paranoias sobre la nueva guerra fría (cuyo final calculo coincidirá con el final de la campaña electoral de EEUU).
Pero en el fondo hay otra cosa que me llama la atención y me parece que no la se está prestando el debido interés. Es el hecho de que Kosovo ha perdido una ocasión única de demostrar en práctica su supuesta independencia. Al no reconocer de forma inmediata la independencia de Osetia de Sur y Abjasia, el gobierno de Kosovo ha demostrado no creer en los principio del derecho de autodeterminación, los mismos que exigía cuando reclamaba su separación de Serbia, y ha puesto en evidencia que su independencia no es el fruto del derecho internacional sino del capricho del poder hegemónico que ejercen el gobierno estadounidense y sus aliados.

En fin, parece ser que el único efecto visible del acelerador de las partículas ha sido que todo siga igual; los ricos hacen más dinero y los pobres más noticias.

Comentarios

Diana ha dicho que…
Tio, qué caualidad! Estan poniendo or la TV "Las tortugas también vuelan"
Boris Matijas ha dicho que…
Ufff que buena es está pelí!!!!
Anónimo ha dicho que…
http://orsai.es/2005/10/la_verdadera_edad_de_los_pases.php

zivili!
Boris Matijas ha dicho que…
jejeje, ¡que bueno!
zivili maestro

Entradas populares de este blog

Es la X

¿Será por la X de extranjero en mi carné de identidad o por no tener la nomina? Me preguntaba a mi mismo en el post Denegado (Noviembre 2007)cuando me rechazaron en Orange. Hoy conocí la respuesta. ¡Es la X! Me fui a la FNAC a comprar el regalo de cumpleaños para una amiga. La iba a hacer una bonita sorpresa regalándola algo que creía que la gustaría tener. Y como no soy socio de la FNAC la pedí a Lesliie que me acompañara y lo compráramos a su nombre. Hola qué tal, etc. Muy bien, etc. Nos gustaría comprarlo a crédito, ¿qué condiciones tenéis? ¿Eres socia? Sí. Pues claro, nos dijo la chica, muy simpática, que nos atendía. Pues puede ser así, o así, también puede ser así y por otro lado si no os gusta puede ser así, de todas formas siempre podéis hacerlo así,.. y durante unos diez minutos nos explicaba todas las opciones del amplio abanico de las posibilidades que FNAC ofrecía a sus clientes. Leslie es socia desde hace cinco años o más, pero nunca antes había utilizado la opción de créd...

Nenúfar

- Nunca puedes olvidarte de tus raíces. - me decía K. en una terraza. A pesar de venir de dos culturas muy distintas K. y yo compartimos unas experiencias parecidas. Él y su familia tuvieron que huir de su país durante la guerra en Camboya y buscar refugio en Francia. Yo y la mía tuvimos que huir de Croacia a Serbia. K. y yo llevamos más o menos el mismo tiempo viviendo en España y cada uno ha vivido otras experiencias migratorias antes de llegar aquí. Nuestras identidades son como las muñecas rusas. Cada identidad nueva rellena el vacío de otra olvidada. Como nenúfar, tengo raíces en el agua y floto haciendo sombra a la memoria de los peces. Las sensaciones caen como las gotas de lluvia de mayo y cayendo hacen círculos concentricos que conectan con las orillas de mis recuerdos. De vuelta me llegan las emociones. Las dejo ir. Y vuelven. Las dejo ir. Y vuelven. Sin parar, hago mí gimnasio emocional. Estoy cada vez más consciente de que mientras no haga paces con Croacia mi pasado no pod...

Adiós a Los Papeles de Boris

Me hizo mucha ilusión recibir la foto que acompaña este post. Me la enviaron de la Plataforma Editorial y muestra Cuenta siempre contigo , mi libro, destacado en la librería de la estación de Sants en Barcelona. Es allí donde bajé del tren a finales de abril de 2002 y donde empezó la bonita aventura que fueron los años vividos en España. Fue en Barcelona donde empecé a poner en orden mis recuerdos y buscar sentido a lo sucedido. En fin, es donde me convertí en el editor de mi propia vida. Donde empecé a contar conmigo.  El nombre de la estación. “Sants” me daba buenas vibraciones. ¿Qué mejor que los santos para saludar y darle la bienvenida a un viajero cansado que se había cruzado media Europa? Aquella noche, al llegar a Sants, tenía una maleta, algo menos de mil euros y un Sí, el poema de Rudyard Kipling escrito en un papel. Me lo había dejado anotado Tanja, mi Preciosa Bruja de Dorćol. Con este himno estoico empezó mis odiseas ibéricas. Me lo dejó escrito en u...